miércoles, 22 de julio de 2009

Un poco de turisteo: Bogotá


Afirma nuestra amiga Ana María Arciniegas - una niña muy viajada-, que “Bogotá es una ciudad bella y divina” (…). Bien, no seremos nosotros quien la contradiga. Otra, Marcela Cubillos, dice que “después de New York y Madrid, Bogotá”. Óle!

Con semejante carta de presentación, familia y amigos, sobran las palabras de un enamorado de esta caótica, contaminada, enorme, clasista, cerrada, indescifrable, difícil, lluviosa, pero insustituible y mágica ciudad.

Bogotá requiere tiempo, dedicación, actitud y ganas de quererla: no es de esos amores fáciles. Se que os sobrarán las ganas y la actitud pero os faltará el tiempo y la dedicación, así que os daré unas pinceladas de Bogotá, ya que de la semana que estaréis en Colombia, sólo 2 ó 3 días estaréis en la capital.

Para pasear: sin duda, pasear a la “mediterránea”, no es una de las actividades del bogotano. Más bien llega al lugar concreto que quiere ir en taxi o en su coche, ya os daréis cuenta por qué.

Bogotá no es una ciudad peligrosa; al menos en comparación con las otras ciudades de la zona: Lima, Caracas, Sao Paulo, Rio…. Aunque claro está, más que Salzburgo si que es, así que podéis pasear con tranquilidad pero sin “dar payaya”, que además de un restaurant muy guapo al que os llevaré, significa “no ponerlo a huevo” ó “no hacer el carajote”.

La Candelaria es el barrio colonial. Una joya desconocida (cada vez menos) para el bogotano con un buen puñado de buenas Iglesias con unos artesonados mudéjares que quitan el hipo. Además, tendréis cafeterías para descansar de las cuestas (Juan Valdés, la pastelería francesa…) y restaurantitos la mar de simpáticos (Moros y Cristianos, Fulanitos….).

Hay una calle, la Jiménez, que aparte de ser un muestrario de edificios maravillosos, vais a poder ver como fluye la vida de una parte de la ciudad.

La subida a Monserrate en teleférico o funicular es obligada y si el día está claro, veréis la inmensidad de Bogotá. Cerca está el barrio de La Macarena, con restaurantitos muy simpáticos.

Una vez se acerque vuestra llegada os haré una ruta más personalizada viendo el grado de “interiorización” que queréis de la ciudad: si queréis mucho, los alrededores del 20 de Julio, y los mercadillos de la 19 con 9ª será vuestro sitio. De ahí, pal norte según queráis. Ah, se me olvidaba: no podéis perderos el barrio de Usaquén.

Abro un debate para que los rolos vayan dejando sus consejos, así lo hacemos más participativo y os darán consejos.

Os voy dejando unos links que merecen la pena:

Turismo Bogotá

http://www.ocholeguas.com/2009/05/14/america/1242294699.html

http://elviajero.elpais.com/articulo/viajes/Candelaria/reinventa/elpviavia/20080830elpviavje_7/Tes

Dos cosas importantes: en Bogotá hace tela de frío, sobre todo por las noches. Y llueve casi todos los días. Avisados quedáis.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Quiero senalar que se les paso un punto IMPORTANTISIMO el cual no se puede escapar visita OBLIGADA a Andres Carne de Res y Gaira, Rumba impajaritable que a nosotros los extranjeros nos hipnotiza.

Edgar Camilo Plazas M. dijo...

Por favor, no omitir ir al estadio a ver al rojo, eso si es un espectáculo, casi como ir a ver al Betis en Sevilla.

Abrazos!

Adri y Jose dijo...

Si Camilo, el Campín sin duda es lugar imprescindible para visitar. Ya se sabe: después de Wembley y el Bernabeu, nuestra Marcela dirá "¡¡y el Campín!!!!" :-), jejeje